En la lucha contra el cambio climático, tenemos que comenzar con un mejor transporte público

Natalie Hoke

Natalie Hoke

diciembre 12 , 2021 11:22 AM

Right now, climate change is one of the biggest, most urgent issues facing humanity. It impacts each and every one of us — and we all have a responsibility to do our part in making a difference, however that may be.

Estas últimas dos semanas, más de 50.000 personas de todo el mundo se reunieron en Glasgow, y en línea, para la Conferencia sobre el cambio climático (Reino Unido) de la ONU, también conocida como COP26. El tema de la conferencia fue “Uniendo al mundo para hacer frente al cambio climático”, e hizo énfasis en cómo debemos unirnos para realmente controlar la crisis climática actual.

Más de 120 de los principales líderes mundiales y figuras públicas subieron al escenario, incluidos: Boris Johnson, Primer Ministro de Reino Unido; Joe Biden, presidente de Estados Unido; Sir David Attenborough; Antonio Guterres, Secretario General de las Naciones Unidas; el príncipe Carlos, y muchos más. Cada uno pronunció discursos vehementes, que reforzaron la urgencia y magnitud del problema.

Como Pioneros en Tecnología del Foro Económico Mundial, en Optibus nos enorgullecemos en colaborar con el funcionamiento del 80 % al 90 % del transporte público de Escocia, y la gran mayoría en Glasgow. As such, this momentous occasion hit especially close to home for us here at Optibus.

Nuestro cliente, First Bus UK, fue incluido en la “Guía de transporte para pasajeros” de la COP26, que explica cómo pueden moverse pasajeros en las ciudades, en forma más sostenible.

Cuando se trata de transporte, un sector que representa aproximadamente el 24 % de las emisiones mundiales de CO2 (la gran mayoría de las cuales provienen de los combustibles basados en petróleo), hay mucho que podemos hacer para reducir el impacto ambiental, tanto a nivel individual como colectivo.

La COP26 nos recuerda el papel fundamental que tiene el transporte público en la creación de un futuro más sostenible y vivible. Con transporte mejor y más eficiente, al igual que mayor uso de vehículos eléctricos y sin emisiones, podemos reducir estas significativamente a nivel mundial, que es exactamente lo que queremos lograr.

Pequeños cambios, gran impacto.

individual cars in traffic

Cuando se trata de nuestros recorridos diarios, tenemos la tendencia a actuar de acuerdo con la comodidad y conveniencia. Sí, frecuentemente es más conveniente, desde el punto de vista logístico, conducir nuestros autos particulares desde y hasta nuestro destino, pero el impacto de hacerlo regularmente puede ser sustancial.

En 2019, solo el sector del transporte fue responsable de la mayor porción de las emisiones de todos los gases de invernadero (GHG) tanto en Estados Unidos (~29 %) como en el Reino Unido (~27 %). Estas cifras son altas principalmente debido al uso de vehículos privados, que a nivel mundial generan más del 45 % de todas las emisiones de CO2 por transporte, particularmente en suburbios, y también dentro de las mismas ciudades.

Aunque cambiar la manera en que nos movemos puede no parecer sustancial a nivel individual, la realidad muestra todo lo contrario. La Asociación Americana de Transporte Público (APTA) estima que tan solo un pasajero que cambie su modo de transporte del vehículo privado al transporte público puede reducir las emisiones de CO2 en 9 kilos diarios, más de 2.177 kilos anuales.

También menciona que “Al eliminar un automóvil y tomar transporte público en vez de conducir, se pueden lograr ahorros de hasta el 30 % en las emisiones de dióxido de carbono”.

Otro ejemplo, de acuerdo con una investigación de 2021 realizada por el gobierno del Reino Unido, el recorrido entre Londres y Glasgow en automóvil personal contribuye 4 veces más emisiones de carbono por pasajero que viajar en autobús. En avión, las consecuencias de este viaje serían peores, con 7 veces más emisiones de carbono que viajar en autobús.

Como millones o billones de personas hacen recorridos como estos de manera permanente, los resultados son monumentales. La APTA estima que el transporte público en Estados Unidos puede reducir anualmente el total de emisiones de CO2 en la inmensa cantidad de 37 millones de toneladas métricas, al igual que 4,200 millones de galones de gasolina.

El transporte público no solo desperdicia significativamente menos que los automóviles privados, sino que es mucho más asequible que tener un automóvil personal. De hecho, los hogares estadounidenses que utilizan el transporte público pueden ahorrar un promedio de US $6.251 anuales.

El transporte masivo también logra que las ciudades estén menos congestionadas, ya que con más personas en autobuses, trenes, bicicletas y patinetas, o caminando a su destino, las calles están menos congestionados por los atascos de automóviles individuales.

En otras palabras, en los Estados Unidos, en un año dado, 1 pasajero – 1 automóvil = miles de dólares ahorrados, menos atascos de tráfico y ~30 % menos emisiones de CO2.

Al tener todo esto en cuenta, la elección es clara. Al aumentar la eficiencia y conveniencia del transporte público, podemos lograr que sea, además de la opción más asequible para los pasajeros, también la más conveniente y deseable: esto es exactamente en lo que Optibus ayuda a los proveedores de transporte público a lograr.

La misión de Optibus en la lucha contra el cambio climático

Electric bus at a charging station

Aunque claramente el transporte público es más asequible y sostenible que los vehículos privados, también debe ser accesible para atraer y retener a los pasajeros. Es en esto que Optibus tiene un impacto directo, al hacer que el transporte público sea más eficiente, confiable, y sobre todo, más conveniente para los pasajeros.

Sí, en teoría, es obvio que todos queremos reducir nuestras emisiones, pero conservar los pasajeros por lo general es más fácil de decir que de lograr. A fin de cuentas, el transporte público debe ser eficiente y lo suficientemente accesible para convencer a los pasajeros a utilizarlo a largo plazo, en vez de optar por vehículos privados.

Optibus tiene la misión de cambiar el paradigma actual, y hacer que el transporte público sea más eficiente, confiable y conveniente que nunca para los pasajeros. Ya más de 500 ciudades en todo el mundo (y contando) lo demuestran.

Con nuestros módulos de Planificación, Programación y Asignación de turnos, los operadores de transporte público pueden garantizar que sus servicios sean más eficientes (por ejemplo, reduciendo los recorridos que no son de servicio, como cuando un autobús se desplaza vacío para regresar a la terminal o comenzar un servicio en otra ruta), lo que resulta en que haya menos autobuses en la calle, durante menos tiempo.

Esto ahorra un estimado de 2.993 kilómetros anuales por vehículo, o prácticamente 94 millones de kilómetros, a un promedio de 0,29 kilos de emisiones de CO2 por kilómetro por pasajero.

De acuerdo con el Instituto de Investigación Mundial, para el 2015, solo aproximadamente el 1 % de todo el consumo de energía del transporte público fue de electricidad. Al proporcionar un producto para la gestión de vehículos eléctricos (EV), también ayudamos a facilitar la muy necesaria transición a flotas sin emisiones en todo el mundo.

Actualmente Optibus es utilizada para la gestión de la flota de vehículos eléctricos de AVTA (anteriormente la flota de EV más grande de Estados Unidos, con 8 millones de kilómetros recorridos), al igual que por Stagecoach (el operador de autobuses más grande de Reino Unido, con una flota 100 % eléctrica en Manchester) y Abellio UK (que atiende diariamente a 1,2 millones de pasajeros en Reino Unido).

Al permitir que el transporte público se haga más consistente, confiable y atractivo para los pasajeros, y facilitar la electrificación de los flotas de autobuses, Optibus está ayudando a ciudades y poblaciones de todo el mundo a reducir la dependencia de los vehículos privados y a hacerse más sostenibles, lo que resulta en una reducción estimada de 100.000 toneladas de emisiones de CO2 anuales.

Esperanzados en el futuro, pero hay trabajo que hacer

Durante el primer día de la cumbre COP26, el Primer Ministro de Reino Unido, Boris Johnson pronunció en su discurso un llamado a la acción para todos los asistentes:

“Si con solo cumbres se solucionara el cambio climático, entonces no hubiera habido necesidad de las 25 COP anteriores para llegar a donde estamos hoy en día. Pero, aunque la COP26 no será el fin del cambio climático, puede y debe marcar el comienzo del final . . . Tenemos la oportunidad de hacer que esta cumbre sea el momento en que comenzamos irrefutablemente a cambiar la marea y contraatacar el cambio climático. Sí, va a ser difícil, pero sí, podemos hacerlo”.

Luego de dos semanas de reuniones y negociaciones, la COP26 ha llegado al cierre. Aunque los resultados no tienen el alcance que muchos deseábamos, se hicieron algunos avances positivos:

  • Se acordó el Pacto Climático de Glasgow, el primer pacto climático para planificar explícitamente la reducción del uso del carbón, y será cumplido por todas las naciones asistentes (197 en total).
  • El Enviado para el Clima de Estados Unidos, John Kerry, indicó que, aunque siempre fue improbable que la cumbre “de alguna manera pusiera fin a la crisis”, se ha dado “el primer paso”.
  • El alcalde de Londres, Sadiq Khan, presidente del Grupo C40, una agrupación de las principales 97 ciudades del mundo, afirmó que el C40 ha movilizado una “alianza internacional de inversores para entregar $1.000 millones (£750 millones) para la compra de autobuses sin emisiones para Latinoamérica”, lo que “está dirigido a reducir el costo de los autobuses mediante la compra al por mayor”.

En la declaración final,el Secretario General de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, dijo que el Pacto Climático de Glasgow “es un paso importante, pero no es suficiente”. . . . Pero el camino del progreso no siempre es una línea recta. En ocasiones hay desviaciones. Otras veces hay baches. Pero sabemos que podemos lograrlo. Estamos luchando por nuestras vidas, y debemos ganar la batalla. Nunca rendirse. Nunca retroceder. Seguir hacia delante”.

La COP26 nos recordó el papel fundamental que tiene el transporte público en la creación de un futuro más sostenible y vivible. Queda mucho trabajo por hacer en el siguiente capítulo, pero somos optimistas por lo que vendrá.

Con transporte mejor y más eficiente, al igual que mayor uso de vehículos eléctricos y sin emisiones, podemos reducir estas significativamente a nivel mundial, que es exactamente lo que queremos lograr.

Para conocer más sobre la plataforma Optibus y cómo puede ayudar a su organización en sus esfuerzos para convertirse en una solución más sostenible, junto con nuestra solución para gestión de vehículos eléctricos, que ayuda a facilitar la transición hacia vehículos sin emisiones, puede reservar una demostración aquí.

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